Las dimensiones de referencia más importantes son:si el drenaje es suave, cómo es el efecto de prevención de olores e insectos, si el material es duradero y si es fácil de limpiar. Hablemos más sobre ello.
Material:
Los sumideros suelen estar hechos de acero inoxidable, cobre y plástico. Desde el punto de vista de la durabilidad y la resistencia a la corrosión, el acero inoxidable y el cobre son buenos. El latón puede liberar iones de cobre, desempeñar un papel bactericida y es más útil para la salud y la limpieza, por lo que es el mejor material en el sumidero.
Rendimiento a prueba de olores:
Un buen sumidero debe tener una buena función a prueba de olores e insectos, generalmente lograda por un sello de agua o una estructura de cierre automático por gravedad. Relativamente hablando, el diseño de cierre por gravedad tiene un rendimiento de sellado más fuerte.
Velocidad de drenaje:
La velocidad de drenaje del sumidero debe considerarse para satisfacer la demanda, especialmente en el área de la ducha o el área de descarga de la lavadora.
Función de filtración:
El sumidero debe tener una buena estructura de filtración para evitar que el cabello y los escombros bloqueen la tubería de drenaje. La mayoría de los productos utilizan la estructura de doble capa de la placa de cubierta superior + la pantalla de filtro interna para lograr una mejor función de filtrado e interceptación.
Tipo de especificaciones:
Seleccione el sumidero apropiado de acuerdo con el entorno de instalación específico y asegúrese de que su desplazamiento y diseño de apariencia coincidan con las tuberías y baldosas circundantes. Hay dos tamaños comunes, cuadrados y largos, los tipos comunes son ducha, cocina y baño, lavadora, y la apariencia es diferente del tipo convencional y el tipo mosaico invisible.
Tratamiento de la superficie:
Algunos sumideros tienen tratamiento superficial galvanizado o recubierto, lo que puede mejorar la resistencia a la corrosión y la estética.
Limpieza y mantenimiento:
Se deben seleccionar sumideros que sean fáciles de limpiar y mantener para reducir el problema del mantenimiento a largo plazo.